Córdoba, Sevilla por Cazorla



Fechas: 28-29-30-31 de marzo de 2008
Asistentes: 2 motos con acompañantes
Recorrido total: 1.400 km


Poblaciones de paso:
Ida: Valencia, Almansa, Montealegre del Castillo, Fuente Álamo, Ontur, Albatana, Hellín, Elche de la Sierra, Riópar, -Nacimiento del Río Mundo-, Siles, Cortijos Nuevos,-Embalse del Tranco-, Arroyo Frio, -Puerto de las Palomas-, Burunchel, La Iruela, Cazorla, Quesada, Peal de Becerro, Torreperogil, Linares, Bailen, Andújar, Córdoba, Écija, Carmona, Sevilla. 
Vuelta: Sevilla, Carmona, Écija, Córdoba, Montoro, Andújar, Bailen, Linares, Úbeda, Torreperogil, Villacarrillo, Gutar, Arroyo del Ojanco, Puente de Génave, Reolid, Alcaráz, El Cubillo, El Jardín, Balazote, Albacete, Chinchilla, Almansa, Valencia.

Ruta completa

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1º día: Valencia-Arroyo Frio (Sierra de Cazorla) -372 km-
Valencia, Almansa, Montealegre del Castillo, Fuente Álamo, Ontur, Albatana, Hellín, Elche de la Sierra, Riópar, -Nacimiento del Río Mundo-, Siles, Cortijos Nuevos,-Embalse del Tranco-, Arroyo Frio.

Desde Valencia a Almansa por la autovía A-7, en dirección a Albacete. Tramo tedioso pero necesario para avanzar hacia el destino. En Almansa tomamos el desvío hacia el sur, pasando las poblaciones Hellín, Elche de la Sierra hasta llegar a Riópar. Descubriremos, en el sur de la provincia de Albacete, que no sólo se puede disfrutar en esta provincia manchega, de sus inigualables llanuras sino que esta zona está plagada de sierras, y de agua, y entre ellas, la Sierra del Segura. El recorrido transcurre con tramos de buenas curvas y asfaltado muy correcto para rodar en moto.
Sobre el medio día llegamos a Riópar, donde daremos buena cuenta de los productos manchegos típicos de la zona. En el Restaurante Puerta del Arco, disfrutaremos, además de estas ricas viadas, de su excelente ubicación en la antigua Casa de Dirección. El primer edificio construido de todo el complejo de las Reales Fábricas de Latón, Cobre y Zinc de Riópar -siglo XVII-

El patio interior de este núcleo de edificios, da acceso al restaurante.

Queda para otra ocasión la visita sosegada a las Reales Fábricas de Riópar.

Tras la comida nos desplazamos al Parque Natural de los Calares del Río Mundo. Dejaremos la moto en el lugar destinado a los vehículos de quien visita el parque y recorreremos a pie estos bellos parajes.

Es la pertinaz sequía, de este año, la que nos impide contemplar las espectaculares cascadas que se forman en el nacimiento del río Mundo. 

Nos adentramos en el Parque natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas y con ello a la provincia andaluza de Jaén.

Llegando al embalse del Tranco de Beas

Embalse del Tranco de Beas.

y su abrupto entorno.

rebasamos la presa del embalse.

y enfilamos una estrecha carretera, en un trazado al que deberemos prestar especial atención en las cerradas y a veces ciegas curvas, sobre todo cuando un vehículo se cruza con nosotros. Este trazado especialmente irrepetible, por lo bello, nos llevará, encajados entre el propio embalse y la suave ladera montañosa por el Parque Natural hasta Arroyo Frío, en dirección a Cazorla. 

Iba ensimismado con el entorno y con la idea de llegar a Cazorla para pernoctar, cuando ví un cartel, a la altura de Arroyo Frío, que anunciaba un hotel: "Hotel Rural Río Arroyo de la Teja"  ¡Y me acordé! Hacía más de 20 años que había estado unos días hospedado en ese hotel y recordaba el entorno como paradisíaco. Así, sin más, nos desviamos y hacia allí nos dirigimos.  Tras adentrarnos unos pocos kilómetros en el interior del Parque, allí estaba el hotel. Nada que ver como yo lo recordaba. Es cierto que está enclavado en plena naturaleza y la tranquilidad rezumaba en su entorno ¡pero no había ni un solo vehículo estacionado en sus enorme parking! Entonces pensé que estaría cerrado al público, en esa época del año. No obstante, paramos las motos y nos dispusimos a preguntar puesto que nos dimos cuenta que estaba abierto. Salió el recepcionista y nos miró con cara de asombro al preguntarle si disponía de habitaciones libres. Nos miró, de arriba a bajo -esperad, que voy a ver, nos dijo- A todo esto, la tabla que contiene las llaves de las habitaciones estaba, que no faltaba una, es decir, vacío absoluto. Salió por una puerta y volvió a entrar por otra, separada a escasos 2 metros, como si hubiera dado una vuelta por el tabique que tenía detrás suyo. ¡Sí, tengo habitaciones libres! joder, y tanto, si eramos los únicos huéspedes del hotel. A pesar de este leve mosqueo por nuestra parte decidimos tomar allí una habitación. Le habíamos preguntado también si se podía cenar en el mismo hotel, pues yo recordaba unas cenas impresionantes. ¡no, eso si que no es posible -nos dijo-! Vale pues iremos a Arroyo Frío a cenar. Cuando ya nos habíamos aposentado en la habitación y nos disponíamos a salir para cenar, nos llama y nos dice: Mirad, si queréis os puedo dar cena, tengo, jabalí, ciervo, etc. osea ¡de todo!. Les dimos las gracias y marchamos a cenar a Arroyo Frio porque ya lo habíamos decidido. 
Cenamos en el restaurante "El Mesón" en Arroyo Frío. Muy bien, por cierto, aunque al final de la cena, nos quitaron la botella de orujo porque el camarero veía que nos hacíamos con ella.
Pero había que volver al hotel del Rio y no sabíamos lo que nos íbamos a encontrar ya que eramos los únicos huéspedes ¿Quizás esa noche nos apareciera "el de la moto-sierra"? hombre algo de yuyu, si teníamos, la verdad. Pero a lo hecho pecho.
Cuando aparecimos en el hotel después de haber cenado, la sorpresa todavía fue mayor. El señor nos estaba esperando con la chimenea encendida en una amplia sala de estar, solo para nosotros, con un buen montón de leña para poder ir echándole al fuego. Le pedimos unos gin-tonic y cuando le dijimos que ya era el último que íbamos a tomar, nos dio las buenas noches y nos dejó solos. La noche fue nuestra ¡Son esos momentos que se recuerdan siempre! Y, es que a veces, que las apariencias engañan.

2º dia: Arroyo Frio (Sierra de Cazorla), Córdoba -218 km-
Arroyo Frio, -Puerto de las Palomas-, Burunchel, La Iruela, Cazorla, Quesada, Peal de Becerro, Torreperogil, Linares, Bailen, Andújar, Córdoba.

La noche había sido nuestra, sí. Pero subir el Puerto de las Palomas con la resaca de la noche anterior fue lo peor que recordaba en mucho tiempo. Esos enormes autobuses que bajaban y uno que subía sin saber por donde meter la moto...

Desde el mirador que hay en la cumbre del puerto, podemos admirar las bonitas vistas del valle.

Y es verdad que un rato allá arriba bien viene para airear la mente de la resaca acontecida la noche anterior y reanudar el viaje con algo más de lucidez.


Antes de llegar a Cazorla, nos encontramos con una bonita panorámica de la población de La Iruela.

Coronando el valle del Guadalquivir. Destaca sobre un abrupto risco, el castillo de La Iruela, de origen árabe-medieval. Mi resaca va menguando...



En Cazorla dedicaremos un largo rato a recorrer esta bella población.

Cazorla es el municipio más grande de la Comarca Sierra de Cazorla. Al fondo de la imagen, el Ayuntamiento.

Plaza de la Corredera



recorriendo sus callejuelas


Balcón de las Herrerías o del pintor Zabaleta.

desde el cual obtenemos esta panorámica del Castillo de la Yedra y el casco antiguo de Cazorla.

Dejamos Cazorla para tomar rumbo directo a Córdoba.

Llegamos a Córdoba con una temperatura digna del período estival. Joder, ¡qué caló¡ en Córdoba.

Tras la búsqueda preceptiva de un hotel céntrico para pasar la noche, dejar trastos y ponernos cómodos, nos disponemos a recorrer las calles y lugares de la ciudad.

Visita obligada es la catedral de Córdoba, antigua Mezquita.

Patio de los naranjos

Interior de la antigua Mezquita de Córdoba.




El espíritu andaluz rezuma por todos los lados, tanto en sus gentes como en sus edificios.

Qué bonitas  sus calles.

y rincones

ambiente animado en las terrazas.

por la noche seriamos testigos, tanto de la bajada de temperatura, respecto al día como de sus acogedores lugares para disfrutar de una buena mesa.

Con Fernando, después de haber degustado una buena cena.

3º día: Córdoba, Sevilla -140 km-
Córdoba, Écija, Carmona, Sevilla.

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Cualquier sitio es bueno para ayudarse a subir a la moto...y más si se hace tras un copioso desayuno.

Repostaje en nuestra ruta hacia Sevilla.


Es difícil pasar por Carmona sin, al menos, hacer un breve recorrido por sus calles.

En la esquina, el Bar Goya, con fachada neomudéjar del siglo XV


Plaza de San Fernando, en Carmona.

Tras unos 140 km desde Córdoba llegamos a la capital andaluza, Sevilla. Fernando, intentando orientarse en esta gran ciudad. Escogemos hotel en pleno barrio de Triana "Hotel Zenit". Estratégico para olvidarnos de la moto y disfrutar de recorrer a pie la ciudad. 

Como siempre, tras haber tomado habitación, un garbeo por la ciudad. En Sevilla no tardas nada en encontrar una taberna donde degustar los pescaitos, y otra mucha variedad de tapas. Y si andas por Triana, no te digo ná.

Empezamos a ver las cosas mejor después de un par de cervezas bien frías.

A Fernando se le quedó uno -pescaito- atascao, pero no fue ná.

Dejamos Triana y pasamos al otro lado del Guadalquivir.

El Puente de Isabel II, conocido popularmente como el Puente de Triana, es el que une el centro de la ciudad con el barrio de Triana.


Desde el puente de Triana obtenemos esta panorámica del río Guadalquivir, con la Catedral y la Giralda a la izquierda de la imagen y la Torre del Oro al fondo.


Bonito paseo a orillas del Guadalquivir, con el puente de Triana salvando el río.

Plaza de toros La Real Maestranza de Sevilla


Catedral de Sevilla y su Giralda.

Pórtico lateral de la Catedral

La Giralda.



Patio de los naranjos



Río Guadalquivir

Torre del Oro, junto al Guadalquivir.

Imprescindible visitar el Parque de Maria Luisa, donde encontramos la popular Plaza de España.



Recorriendo el barrio de Santa Cruz.

Plaza de las Cruces, en el barrio de Santa Cruz.



bonita fachada sevillana que alberga un Hostal

El Mesón de la Infanta, es buen lugar para degustar productos de calidad, en un ambiente muy de la tierra. Por la noche también disfrutamos del buen yantar de la cocina andaluza en el "Restaurante El Cairo", situado en el centro de la ciudad. Una buena manera de despedir nuestra estancia en la preciosa ciudad de Sevilla.


4º día: Sevilla, Valencia (por la Sierra de Alcaraz) -670 km-
Sevilla, Carmona, Écija, Córdoba, Montoro, Andújar, Bailen, Linares, Úbeda, Torreperogil, Villacarrillo, Gutar, Arroyo del Ojanco, Puente de Génave, Reolid, Alcaráz, El Cubillo, El Jardín, Balazote, Albacete, Chinchilla, Almansa, Valencia.

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Día de retorno a Valencia, tenemos algo mas de 600 kilómetros por delante.

Compartimos repostaje con la benemérita.

Panorámica de Andújar: Villa ubicada a orillas del Guadalquivir en las faldas de Sierra Morena.

Alargamos la hora de la comida con intención de hacerla en Alcaraz (Albacete). Sí, llegamos desfallecidos, pero valió la pena. Alcaraz nunca defrauda. 

Torres de La Trinidad y de El Tardón en la Plaza Mayor de Alcaráz.

Con las Sierra de Alcaraz al fondo.

recorriendo sus callejuelas.

La sierra, siempre omnipresente desde cualquier lugar de la población.



A punto de salir de Alcaraz, dispuestos a encarar el espectacular trazado que, por El Jardín -territorio motero, donde los haya-, tenemos hasta llegar a Albacete.

El descanso del Guerrero. Se ha ganado el colofón del viaje.