Organiza: Moto Club "El Rectito"
Asistentes: Unos 100 moteros
Kilómetros realizados: 632 km -de ruta 570 km-
Poblaciones de paso:
Chiva-Gestalgar-Pedralba-Lliria-Olocau-Altura-Alcublas-La Pobleta-La Yesa-Chelva-Chulilla-Chera-Villar de Tejas-Casas Medina-Tuejar-Aras de los Olmos-Cruz de Moya-Sinarcas-Los Corrales-Caudete de las Fuentes-Venta del Moro-Campo Arcis-La Portera-Yátova-Dos Aguas-Real de Montroi-Turis-Godelleta-Chiva.
Mapa del recorrido realizado:Ver mapa más grande
Un nuevo proyecto de hacer kilómetros en moto, en una sola jornada, que nace en Valencia. Organizado por el motoclub "El Rectito". Pues, como es lo que nos gusta, si podemos vamos. Fuimos, y lo hicimos.
La novedad con otros Desafíos consiste en que en el Levante Experience, cada uno va a su aire, siguiendo el road book facilitado por la organización y que, al final, acaba en el Navegador, para qué nos vamos a engañar.
En el recorrido de la ruta hay señalados algunos pasos de control, unos señalados y otros no, los cuales hay que pasar para que te sellen el pasaporte de control. Para la comida se ha señalado un único punto en Aras de los Olmos "Restaurante Hotel Aras Rural", en el cual, cada uno, y conforme vaya llegando, dará buena cuenta de la misma.
En el recorrido de la ruta hay señalados algunos pasos de control, unos señalados y otros no, los cuales hay que pasar para que te sellen el pasaporte de control. Para la comida se ha señalado un único punto en Aras de los Olmos "Restaurante Hotel Aras Rural", en el cual, cada uno, y conforme vaya llegando, dará buena cuenta de la misma.
Cartel anunciador del Desafío.
No podía faltar la camiseta conmemorativa del evento
Y cuando llegas al final de la jornada: El diploma de reconocimiento.
El centro de operaciones se ubicó en la población de Chiva. El día antes de la ruta, acudimos a esta población a formalizar la inscripción, recoger el dorsal, el road book y la camiseta. Y allí estaba Adrián para inmortalizar el momento, en el que uno mismo y Boiro lo hacíamos.
De MotoAlmuerzo Valencia acudíamos: Kiko, Manire, Treinta, Boiro y Pacovi. Habíamos quedado en el Hotel la Carreta, a tomar café y acudir a la cita juntos, con el fin de hacer la salida que se había programado en pequeños grupos cada 5 minutos.
Kiko y Treinta en la cafetería de la Carreta. ¿Tantas ganas de moto que, ni para tomar café se quitan los cascos? ¿O es que estaban haciendo las presentaciones de sus respectivos intercomunicadores?
Ya, los cinco en "La Carreta", partimos hacia Chiva para tomar la salida del Desafío Levante Experience.
En el lugar de la salida. Donde, los que no acudieron el día antes, recogían el material.
Desde las 7 de la mañana han estado saliendo moteros.
Preparando la salida, en grupos de 4 o 5 motos
Todavía era de noche, pero estábamos ansiosos de emprender la ruta. Eran las 7,30 horas de la mañana cuando nosotros lo hacíamos
Mientras el día despertaba.
Nosotros también lo hacíamos pero, a lomos de nuestras monturas.
sentir el amanecer rodando en moto es una gozada digna de disfrutarla. Ocurre todo lo contrario a cuando se te hace de noche en la carretera... aparte de disfrutar del alba, tienes toda la jornada por delante.
El dia ya está totalmente abierto.
sólo el frescor de la mañana nos hace recordar que todavía es temprano.
Hacia el Santuario de la Cueva Santa.
Bonitos parajes, los de la ruta.
Primer control de la ruta. En el Santuario de la Cueva Santa "territorio motero, como diría JLlorca"
Nuestro grupo, con cara de disfrutarlo y planteando donde será el almuerzo.
No estaba en el guión. Pero había que almorzar. En Andilla lo hicimos.
Dejamos las motos y...
...subimos al restaurante donde almorzaríamos: Restaurante "La Terraza de Andilla"
situado en la Plaza de la Iglesia.
Como hacía algo de fresco lo hicimos dentro. Buen almuerzo y mejores carajillos -en plural-
Desde la terraza del restaurante: Vistas de la población con la sierra de Javalambre al fondo.
Sierras tristemente devastadas por el incendio acaecido en junio del 2012.
Tras el largo almuerzo continuamos la ruta. Aún las rectas son atractivas, cuando se combinan bien en una ruta.
Breve parada para evacuar lo bebido. Vale, y a contemplar la naturaleza en "parao", que bien vale la pena..
Respostando en Chelva.
Paisajes en ruta.
Otros. Si no tan bellos, sí curiosos
Esta silfide se empeñó en que los moteros somos como los cazadores -que su hermano lo es-, la escusa para almorzar es la moto -que sí-, que hacemos 12 kilómetros y nos pasamos la mañana en el bar almorzando. Bueno nosotros haremos alguno mas -le dije-. Que no, que a mi no me engañaís.
Vale, mira que moto mas guay lleva mi colega...
La moto del Boiro ¡Cómo le gustaba!. Para que luego digan de las BMWs. Porque...era la moto, no?
Otro alto en el camino. Esta vez a refrescarnos por dentro. Luego no nos explicamos cómo somos los últimos en llegar.
Nueva parada en el pantano de Benagéber.
Esta foto no sé como coño ha salido así. Me imagino que será por culpa del Treinta, que no sé como se las apaña pero a todas las fotos en las que aparece les da un aire especial -como de estar siempre por medio, o algo así-
Otro de los grupos que hacían el Desafío. El pantano es parada obligada en cualquier ruta por la zona.
¡Ale, que nos vamos...!
Llegada al Restaurante Aras Rural, lugar de la comida.
Muchas motos aparcadas. Señal de que todavía había personal comiendo. Mejor dicho, terminando de comer.
Con esta cara me quedé, cuando el camarero dijo que ya no quedaba "Olla de pueblo". Tanto es así, que se encargó de que al final, tuviéramos nuestra "pequeña" ración.
JLlorca, Micky y otros colegas. También son de los que aprovechan el tiempo en la ruta...
Mesa de los organizadores.
En el postre,
Manire cierra el restaurante.
En disposición de marcha. Nos quedaba todavía unos cuantos kilómetros.
Aras de los Olmos, vista desde el restaurante.
Abandonando el restaurante Aras Rural.
Esta parada sería de las últimas. Aquí se entretuvo Boiro limpiando el parabrisas de la moto. Ahora os pillo, -nos dijo-. Pues no, no le vimos el pelo hasta llegar a Chiva.
Llegamos a Chiva a las 7,30 de la noche. Tiempo de recoger el diploma de asistencia a este Desafío y buscar lugar donde tomarmos unas merecidas cervezas.
Foto de recuerdo, faltaba el Treinta que, después de bajar la Portera -a ritmo legal-, marchó directo a casa dado la hora que era.
Solo cabe después de esta jornada motera. Felicitar a los organizadores de la misma por su buen hacer, tanto en el diseño de la ruta como en la organización del evento: Controles, avituallamiento, etc.
¡Larga vida a Levante Experience!
