Soria; Laguna Negra-Cañón Río Lobos

Fechas: 4 días -25 al 28 de octubre 2018-
Recorrido total: 1.397 km
Asistentes: Ismael, Esteban, Paco, Kiko, Vicente, Antonio, Ernesto, Pacovi, Julio, Santi, Salva, Pedro, Manolo.

Muchas ganas tenía yo de rodar con los moteros de mi pueblo y otros, de pueblos aledaños, que forman la peña motera Ha100docamino. Aunque es verdad que en alguna ocasión he compartido algún que otro almuerzo, de lo que tenía ganas es de hacerme un viaje con ellos. Les doy encarecidamente las gracias, tanto a los organizadores de este viaje como al resto de asistentes por haberme permitido compartir su inestimable compañía y donde lo mejor de todo ha sido la buena sintonía del grupo, algo que, aunque parece obvio, todos sabemos que no siempre ocurre en un grupo tan numeroso. Y es que, aunque el tema común es rodar en moto, al final, en un viaje de varios días, lo más importante es la armonía que se genera en el grupo.
Y me viene a la memoria, que me ha pasado algo parecido a cuando asistí a la "I Matinal Motera de Enguera" por allá el año 2010. Y no es otra cosa que pensar, que cuando uno andaba en su juventud, haciendo ruido por las calles del pueblo con las motos de la época, éramos cuatro los aficionados a las dos ruedas ¡Qué alegría ahora, de ver, cuanto afición hay!

1º día: jueves, 25 octubre - (Valencia-Soria) 450 km
Valencia, Llíria, Losa del Obispo, Chelva, Tuejar, Titaguas, Aras de los Olmos, Santa Cruz de Moya, Manzaneruela, Landete, Fuentelespino de Moya, Campillos-Paravientos, Boniches, Campillos-Sierra, Huerta del Marquesado, Valdemeca, Tragacete, Masegosa, Cueva del Hierro, Poveda de la Sierra, Molina de Aragón, Anquela del Ducado, Maranchón, Layna, Medinaceli, Miño de Medinaceli, Barahona, Villasayas, Almazán, Quintana Redonda, Soria.

2º día: viernes, 26 octubre - (Soria-Laguna negra-Logroño-Soria) 303 km
Soria, Tardesillas, Hinojosa de la Sierra, El Royo, "Embalse de la Cuerda del Pozo", "Laguna Negra de Urbión", Montenegro de Cameros, Villoslada de Cameros, Villanueva de Cameros, Pradillo, Tordecilla en Cameros, Panzares, Islallana, Logroño, Panzares, Pradillo, El Hoyo, Lumbreras, San Andrés, Puerto de Piqueras "Evitando el Túnel", La Póveda de Soria, Barriomartin, Almarza, Garray, Soria.

3º día: sábado, 27 octubre - (Soria-Laguna negra-Cañón Río Lobos-Soria) 208 km
Soria, Cidones, El Quintanejo, "Laguna Negra", Vinuesa, Molinos de Duero, Covaleda, Duruelo de la Sierra, Regumiel de la Sierra, Comunero de Revenga, Quintanar de la Sierra, Palacios de la Sierra, San Leonardo de Yagüe, Casarejos, "PN del Cañón del Rio Lobos", Castillo de Ucero, Ucero, Valdeavellano de Ucero, Aylagas, Fuentecantales, Cubillos -pueblo abandonado-, Cubilla, Muriel Viejo, Abejar, Herreros, Villaverde del Monte, Cidones, Soria.


4º día: domingo, 28 octubre - (Soria-Valencia) 436 km
Soria, Almenar de Soria, Berdejo, Bijuesca, Torrijo de la Cañada, Villalengua, Moros, Ateca, Valtorres, La Vilueña, Munebrega, Nuévalos, Daroca, Calamocha, Teruel, Valencia.

Mapa ruta completa


1º día: jueves, 25 de octubre - (Valencia-Soria) 450 km
Valencia, Llíria, Losa del Obispo, Chelva, Tuejar, Titaguas, Aras de los Olmos, Santa Cruz de Moya, Manzaneruela, Landete, Fuentelespino de Moya, Campillos-Paravientos, Boniches, Campillos-Sierra, Huerta del Marquesado, Valdemeca, Tragacete, Masegosa, Cueva del Hierro, Poveda de la Sierra, Molina de Aragón, Anquela del Ducado, Maranchón, Layna, Medinaceli, Miño de Medinaceli, Barahona, Villasayas, Almazán, Quintana Redonda, Soria.

Un pequeño reconocimiento al amigo Ismael, por el estrés que debió de padecer, cuando la noche anterior a la salida, la moto daba problemas mecánicos y no arrancaba -a buen seguro, que los aficionados a viajar en moto, sabéis cómo se vive la noche previa a cualquier viaje-. Al final, y como es un hombre de recursos, sacó su segunda moto e hizo el viaje sin ningún problema.
¡Grande Isma!

Unos salían de Enguera otros lo hacíamos desde Valencia para agruparnos en la gasolinera Galp –en la pista de Ademuz-. 
Pasadas las 9 de la mañana y con la emoción contenida, como siempre ocurre cuando estás a punto de emprender un viaje en moto de varios días, nos encontrábamos los primeros en llegar, esperando al resto del grupo que no tardaron en aparecer. Y allí nos reunimos los ocho moteros que íbamos a iniciar la primera jornada de las cuatro que teníamos por delante: Vicente, Esteban, Ismael, Ernesto, Paco, Antonio, Kiko y Pacovi. Este grupo inicial de moteros se vería aumentado en las siguientes jornadas en la medida que cada cual lo podía hacer dependiendo de sus responsabilidades laborales -o bien de permisos domésticos-, que todo hay que decirlo. 
Tras los saludos, presentaciones de los que no nos conocíamos y las charraetas de rigor, salíamos del punto de encuentro a las 9,30 de la mañana, con una temperatura de 18 grados que, en mi caso, con el sonido de Fito y los Fitipaldi sonando en el interior de mi casco,  invitaba a olvidarse de todo y disfrutar de rodar en moto. Y, si acaso gozar, pensando de los muchos kilómetros que quedaban por delante.


En Titaguas se produjo el primer repostaje, tanto de la jornada como del viaje.

En Ara de los Olmos, paramos a almorzar. 

Que bién se almuerza en este lugar Los Tornajos, y no te digo nada comer. Si tenéis la oportunidad en alguna ocasión que os pille por aquí, no la dejéis escapar.


Venga que faltaba Ismael

En el término de Cañete, el otoño se manifiesta en todo su explendor. Una forma un tanto romántica de proponer una parada para su contemplación o bién técnica, para aliviar nuestras vejigas.



Tragacete. De nuevo repostaje. En la foto con Ismael... Che, che, che.

Desde un mirador situado a la derecha de la carretera obtenemos una bonita panorámica de la ciudad de Molina de Aragón, provincia de Guadalajara, hacia donde nos dirigimos, con su omnipresente castillo, situado en una ladera dominando perfectamente el valle.






Al llegar a Molina de Aragón lo primero que encontramos es el Puente Viejo, de origen medieval y estilo románico, sobre el río Gallo -siglo XII-.

Enfrente del mismo encontramos lugar para hacer un tentempié, que en realidad es lo que andamos buscando.

Sí, algo ligero, para reponer fuerzas.


y buena cuenta dimos de ello. 

El café lo tomaremos en Medinacelli, provincia de Soria.


Ismael y Ernesto. Alguien preguntaba ¿ande irán? pues está claro: Lo indica el cartel

Medinaceli, siempre merece un recorrido por sus laberínticas calles.

y nunca mejor dicho, porque mira que nos costó encontrar la Plaza Mayor. Claro, tanto charrar...

Pocos cafés veo en la mesa. Cervezas sí. Y algún Gin que otro ¡Cómo sois!

Arco romano de Medinaceli.

Eran las 19,30 horas cuando llegamos a Soria. Tomamos aposento en el Hostal La Vitorina, y tras descansar un breve rato...

nos dispusimos a otros menesteres

disfrutar de una buena y contundente cena. Nos la habíamos merecido.


Un verdadero acierto este Fogón -por recomendación de Ismael, que ya lo conocía-. La cena del sábado, cuando estemos todos, será en este mismo lugar. Se lo ha ganado con creces.

2º día: viernes, 26 de octubre -  (Soria-Laguna negra-Logroño-Soria) 303 km
Soria, Tardesillas, Hinojosa de la Sierra, El Royo, "Embalse de la Cuerda del Pozo", "Laguna Negra de Urbión", Montenegro de Cameros, Villoslada de Cameros, Villanueva de Cameros, Pradillo, Tordecilla en Cameros, Panzares, Islallana, Logroño, Panzares, Pradillo, El Hoyo, Lumbreras, San Andrés, Puerto de Piqueras "Evitando el Túnel", La Póveda de Soria, Barriomartin, Almarza, Garray, Soria.


Hoy se incorpora al grupo mi amigo Julio -enguerino consorte-. Vive en Guadalajara y rodará todo el día con nosotros para volver a casa al terminar la jornada. Seremos pues, un grupo de nueve moteros, dispuestos a acabar con todos los torreznos de Soria, porque, ma que nos gustan.
Julio que ya lleva unos cuantos kilómetros, desde que salió a primera hora de la mañana de Guadalajara, nos anuncia que la jornada será fresca. Más fresca que el día anterior como así indican los 8 grados de temperatura que marca el termómetro.
Aunque para hoy teníamos previsto hacer una ruta circular por la provincia de Logroño y ante la previsión de mal tiempo para la jornada de mañana sábado con lluvias y mucho frío optamos por hacer la ruta de la Laguna Negra hoy viernes, por si acaso mañana no pudieramos subir.
Salimos de Soria a las 10,15 algo mas abrigados que la jornada anterior. Un pequeño despiste hace que los que iban justo de gasolina no repongan. En busca de gasolinera perdimos algo de tiempo. Por estos lugares no es tan fácil encontrar gasolineras, incluso si las encuentras, los horarios no son tan amplios como ocurre en el levante, por ejemplo.
Paco era el que más justo andaba de gasolina. Le echó al depósito la que llevaba en una botella de plástico y a confiar en no quedarnos tirados.
En la pequeña población de El Royo paramos a preguntar por la gasolinera más cercana. Aunque el navegador ya nos indicaba una, no muy lejana, preferimos no confiarnos y preguntamos a un lugareño.

Tan pronto como llevamos a cabo el repostaje, enfilamos hacia la Laguna Negra. Al no ser fin de semana los vehículos motorizados pueden subir hasta el último aparcamiento, situado a escasos 300 metros de la Laguna.

Foto de familia. Ismael aprovechó la ocasión para hacernos una  demostración de su dominio con el inglés dando precisas instrucciones a la chica que nos estaba haciendo la fotografía. Que por cierto, hablaba perfecto castellano. 

Venga Esteban, que estamos ahí ya.

Magestuoso y longevo pino situado al borde de la senda que nos lleva a la laguna



Es impresionante la primera visión de la laguna. Terminas de subir estas escaleras con la mirada fijada en cada uno de los escalones para no dar un mal tropiezo. Cuando llegas al último escalón, levantas la vista...

y ante tus ojos tienes esta visión...¡Espectacular!


El otoño deja su impronta en el color del paisaje. La Laguna Negra se halla situada a 1.753 metros de altitud en el término municipal de Vinuesa (Soria). De origen glaciar y situada en la sierra de los Picos de Urbión, forma parte del Parque natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión.

Con Julio posando para el recuerdo. 

Una pasarela de madera nos permite hacer un breve recorrido por la orilla de la Laguna

y contemplar la Laguna desde otras perspectivas




Uno mismo visto por Ismael. Gracias campeón. Estás en todo.

tertulia a orillas del lago

De cinco, uno sin el móvil. En ese momento, claro.

Boiro, contemplando el otoño

Desde que Julio se compró la moto y a pesar de haber pasado buena parte del verano en Enguera, tanto él como yo, nos ha resultado imposible coincidir para rodar juntos por nuestra Sierra a pesar de los intentos. Ha tenido que ser en Soria y la Sierra de Urbión, para coindicir. A ver si la próxima es por la provincia de Guadalajara, que a mí, me tiene muy pillado.

Camino a Vinuesa y en pleno bosque se encuentra el restaurante Los Ranchales.Yo lo conocía, pues hace algunos años anduve por aquí haciendo una ruta en solitario. En aquella ocasión me pareció muy recomendable, pues me sentí muy bien atendido. Quizás porque eramos muchos y estaban preparando las reservas de la comida se nos atendió con algo de estrés y sin muchas ganas, además de que nos cobraron como a auténticos "Guiris".  En fin, ellos se lo pierden, pues al día siguiente, cuando volvimos a pasar por aquí, lo hicimos de largo y almorzamos en Vinuesa. 

Lo que sí hicimos es disfrutar del maravilloso entorno.


delante de una cerveza, que supo a poco

y mas cuando apareció el camarero, con un plato de torreznos -a modo de disculpas, supuse-.

torreznos que yo regué con un buen trago de vino. Anticipo de nuestro próximo destino: La Rioja

Tomamos rumbo a la Calle del Laurel en Logroño. Sí, nada de cartografía: Calle del Laurel.
La N-111 se nos presenta como una carretera motera, como indican los carteles al borde de la misma. Qué gozada de trazado, que con su asfalto impecable, invitaba a disfrutar de las trazadas y olvidarnos de que nada mas existe. Salvo los límites de velocidad, claro.

Ibamos secos. En el nº 2 de la calle Laurel ya hicimos la primera parada






Un primer plano del Road Lider. Para traernos aquí, no se ha perdido. Ha venido más derecho que un taco.

Cómo nos gusta la barra.

Otra parada























Cambiamos de lugar

en busca de otra degustación de pinchos.

Todo no es la calle Laurel. Tardamos en encontrarlo. Paco no se acordaba muy bien donde estaba y aunque al final lo encontramos cerrado...

justo enfrente nos hicimos la última tapa del medio día, antes de partir de Logroño

Camino de vuelta a Soria paramos en el término de Viguera, a tomar el café

Vuelta de nuevo por la N-111 y el antiguo puerto de Piqueras, sin tomar la variante del túnel. Eran las 18,30 horas cuando llegamos a Soria. Nos despedimos de Julio que retornaba a Guadalajara. Todavía a él le quedaba hora y media de moto.

En la puerta del hotel ya espera Santi, recién llegado de Xátiva para incorporarse al grupo. Todavía esperamos a Salva que estará al llegar, desde Enguera.

En Soria puede hacer todo el frío que os podáis imaginar pero la conocida como Plaza de Herradores, cuando cae la noche, siempre muestra este impresionante ambiente.

Lugar de tapas y copas por excelencia en Soria.


Nosotros buscamos para cenar, la tranquilidad del  Asador Ecus a escasos metros de la plaza.

El horno, situado en la misma sala del comedor

Salva ¿interesándose por el funcionamiento del horno? o ¿metiéndole caña al cocinero? Y es que, traíamos hambre.

Cochinillo para unos



















                                                              Cordero para otros















3º día: sábado, 27 de octubre - (Soria-Laguna Negra-Cañón del Río Lobos-Soria) 208 km
Soria, Cidones, El Quintanejo, "Laguna Negra", Vinuesa, Molinos de Duero, Covaleda, Duruelo de la Sierra, Regumiel de la Sierra, Comunero de Revenga, Quintanar de la Sierra, Palacios de la Sierra, San Leonardo de Yagüe, Casarejos, "PN Barranco Rio Lobos", Castillo de Ucero, Ucero, Valdeavellano de Ucero, Aylagas, Fuentecantales, Cubillos -pueblo abandonado-, Cubilla, Muriel Viejo, Abejar, Herreros, Villaverde del Monte, Cidones.


Hoy somos 10 moteros. Se han incorporado Santi y Salva. Son las 10,15 cuando salimos, con el termómetro marcando los 5 grados. De nuevo enfilamos a la Laguna Negra, puesto que Santi y Salva, el día anterior no estaban presentes y así estaba previsto. Además al resto del grupo no nos importó repetir ruta puesto que los bosques por los que discurre son dignos de recorrer cuantas veces sea preciso.
En la medida que nos vamos acercando, una ligera lluvia hace acto de presencia para convertirse en nieve al comenzar a subir hacia la Laguna, ya que la temperatura comienza a descender a medida que tomamos altura.
Por cierto, después de la experiencia de ayer con el repostaje de Paco, la jornada se terminó repostando y hoy ha empezado lo mismo, para aquellos que ayer no lo hicieron.

Llegamos al primer aparcamiento habilitado de la laguna y hacen que nos detengamos. A diferencia de ayer, hoy que es sábado, los vehículos a motor no pueden subir hasta el segundo aparcamiento, hay que dejar las motos y subir en autobús el último tramo, hasta la Laguna. En un primer momento se decide que suban los que ayer no lo hicieron mientras nosotros esperaríamos en un restaurante tomando algo. La nieve empezó a ser persistente y ante el riesgo de que pasado el tiempo necesario para la subida, visita y vuelta en el autobús, la nieve empezara a cuajar, con el consiguiente riesgo de que se formasen placas de hielo, se tomó la decisión de bajarnos todos juntos a Vinuesa y darnos un merecido homenaje al resguardo de las inclemencias del tiempo.

Mientras estuvimos allá arriba, disfrutamos de las primeras nieves de este 2018


Tertulia a la fresca de las alturas

La nieve empezaba a tomar forma

y el bosque se empezaba a tupir de un blanco manto

Tomaremos pues, las de Villadiego. Una retirada a tiempo es una victoria.

El último tramo de subida y bajada a la Laguna es circular, de un solo sentido de marcha.

Lo que, a pesar del mal tiempo, facilitará para la realización de algunas fotos.

Kiko parece que quiere asegurarse de que el asfalto no contiene placas de hielo

Con este tiempo resulta prudente, de vez en cuando, tocar el asfalto con la suela de la bota, para ver si se agarra, lo que indica que no hay hielo o, por el contrario, si desliza.

Rodar así es un gustazo, el exceso de precaución que has de llevar en la conducción se ve recompensado con creces por el paisaje.

En la medida que perdemos altura, los copos de nieve se convierten en agua.











Una vez terminada la bajada, enfilamos largas y llanas rectas.

En esta ocasión pasamos de largo Los Ranchales y nos dirigimos a Vinuesa.

disfrutando de nuevo de la estrecha carretera que transcurre por un espeso bosque de pinos


En Vinuesa almorzamos en el restaurante del hotel Alvargonzález


Que además del contundente bocata se descolgaron, para gusto de los comensales, con un plato de lustrosos torreznos, recién hechos.


Y ante las lujuriosas miradas -véase la de Ismael-, Antonio, con su sabia experiencia,

sacó cuentas y puso orden en el reparto de torreznos.

que así quedaron.

Tras el almuerzo-comida, nos dirigimos hacia el Cañón del Río Lobos 

En el último aparcamiento hasta donde se puede llegar en vehículo


Foto de grupo que a mí me pilló en otros menesteres.

Había que pagar 2 euros por dejar las motos y continuar a pie, el último tramo del cañón.


No lo hicimos, pero recomiendo a los que estas líneas lean, que no se lo pierdan en otra ocasión que anden por este lugar. Es un escaso kilómetro de ida y otro de vuelta a pie, bordeando el río Lobos hasta llegar a la Ermita de San Bartolomé, totalmente integrada es el agreste paisaje. Un paseo muy corto que vale la pena realizar. Tuve la ocasión a los pocos días de volver por este lugar, camino a Burgos, y sí lo hice. Las imágenes siguientes son de la Ermita de San Bartolomé y su entorno.

La Ermita vista desde la cueva

El río y su entorno

Panorámica del lugar

Tras el pequeño recorrido por el cañón, ya de vuelta, me adelanto al grupo y espero para sacar alguna imagen de los compañeros. Es Ismael quién me impronta de espaldas, mientras espero.

Ahí van llegando






Antonio cerrando grupo

De nuevo en ruta, ya agrupados

Castillo de Ucero

Atravesando la población de Ucero,

Tras subir por un corto puerto, de espectacular y retorcido trazado, hasta alcanzar el mirador de Galiana, de donde se obtienen expléndidas panorámicas del Cañón, continuamos por una carretera algo estrecha pero de asfalto mejor de lo esperado.



En este tramo, el asfalto pierde dignidad.

pero el entorno suple con creces cualquier "pero" que se le pudiera achacar al trazado.



Bordeando el pueblo despoblado de Cubillos. Cuantas cosas te vienen a la cabeza cuando piensas en estos pueblos con vida en tiempos pretéritos y ahora totalmente despoblados y algunos incluso abandonados.

Si mi paso por aquí hubiera sido en solitario, sin duda habría aparcado la moto en la entrada del mismo, para recorrer sus calles. Es algo que recomiendo a quien nunca lo haya hecho. Una verdadera experiencia, por los sentimientos que en uno evoca.

Volviendo a la ruta y dejando de dispersarme.


Para disfrutar plenamente de los bosques que nos rodean





Ermita de la Blanca. Situada en el término municipal de Cabrejas del Pinar. La encontramos justo en la intersección con la N-234

Circulando por la N-234 en dirección a Soria

Y me viene a la cabeza las veces que he recorrido esta carretera N-234 (Sagunto-Burgos), hasta que completé el recorrido total, disfrutando con cada uno de los pueblos de paso y por cierto también, que tengo pendiente de publicar en este blog, la 2ª y 3ª parte de la N-234


Eran las 15,30 cuando llegamos a Soria. Tras haber rodado toda la mañana sobre los 7 u 8 grados, el termómetro había subido hasta los 14,30 grados cuando llegamos a Soria.


Las ruinas de Numancia, antigua localidad celtíbera que prefirió incendiar su pueblo antes que entregarse a los romanos se encuentra a escasos ocho kilómetros de Soria. Cuatro de los nuestros se atrevieron a acercarse a Numancia. No contaron que se encuentra enclavada en un cerro sin abrigo de ninguna clase, y claro, con la rasca que hacía las pasaron "Numantinas". Y si no, a sus caretos me remito ¡Por dios!

Mientras, los demás nos habíamos quedado en el hotel a disfrutar de un largo descanso y a tomar alguna cerveza en tanto que esperamos a los dos compañeros que faltan por llegar, Pedro y Manolo. Ya todos juntos nos disponemos, como cada noche, a disfrutar de la cocina castellana. Nuestros estómagos son tan agradecidos que repetimos en El Fogón del Salvador

Vaya homenajes nos dimos en este lugar

El cochinillo ¡espectacular!

4º día: domingo, 28 de octubre - (Soria-Valencia) 436 km
Soria, Almenar de Soria, Berdejo, Bijuesca, Torrijo de la Cañada, Villalengua, Moros, Ateca, Valtorres, La Vilueña, Munebrega, Nuévalos, Daroca, Calamocha, Teruel, Valencia.


Hoy domingo es el día de regreso. El grupo se ha ampliado tras la incorporación de Pedro y Manolo. Somos pues, 12 moteros los que emprendemos el regreso a casa. Sobre las 10 de la mañana, con seria amenaza de lluvia y con una temperatura de 3,5º iniciamos la partida.

Toca abrigarse sin contemplaciones

Salva iba de estreno con su flamante Rukka, supongo se percataría que en moto, si hace frío pasas frío. Eso sí, su impermeabilidad no creo que la supere ningún traje de moto.

Creo que en esta gasolinera han puesto una foto de los  "Ha100camino a Soria".

Bonita panorámica cuyo autor es Pedro.

Que tomó el testigo

en la toma de imágenes en marcha.

de las cuales tenemos una bonita serie







En Daroca paramos unos breves instantes para recapitular la ruta a seguir.

Se hizo preciso comentar el frío que habíamos pasado durante toda la mañana. Pues además de los entre 2º y 4º de temperatura, la mayoría del recorrido la habíamos hecho con algo de viento y una pertinaz llovizna.

La decisión estaba clara. Rumbo a Calamocha a comer y entrar en calor.

Ismael y Salva

Uno mismo

Calamocha. Nuestro destino para llenar los estómagos. De nuevo la nieve hizo una tímida aparición.

Pero esta vez nos pillará a buen recaudo "Hotel Calamocha" y con un buen estofado sobre la mesa.

Tan solo me queda daros las gracias por dejarme compartir con todos vosotros varios días de viaje. De vuestro viaje a Soria, que terminó siendo, también el mio. Con kilómetros de asfalto, de buenas viandas pero sobre todo de risas, muchas risas.
¡Un placer amigos!